POSADO VERSUS ROBADO


Y van y lo discuten. Y se lo toman en serio. Y aportan pruebas a favor de su teoría.
:"Están en una postura forzada" "Tienen el sol de cara"

... Porque el asunto es, ni más ni menos, analizar si la foto de una pareja que aparece en una revista del "coeur" y cogidos en una actitud más que cariñosa, está hecha para dar de comer al morbo del personal (cobrando ellos, claro) o los han pescado " in fraganti".

Están también las de top -less en la playa. Como si en estos tiempos alguien hiciese caso a unos pectorales más menos atractivos. No lo entiendo
.
En mis tiempos, cuando yo era joven, las fotos no eran nunca "robadas". Eran siempre pagadas. O al que te vendía el carrete y luego te cobraba el revelado o al fotógrafo establecido en su taller.

Todos los mayores de tropecientos años, tenemos fotos de un tamaño que ahora nos asombra.

Cinco por tres centímetros o poco más .En blanco y negro lógicamente .Son las que nos hacíamos en la Cruz de los Caídos, en el paseo central del parque, apoyados en las barandillas del estanque o bajando la cuestecilla del templete de los jardinillos. ¡Ay Señor qué tiempos!

Las de estudio eran todo un poema

..Habíamos ido a la peluquería. ¿Acaso pensáis que íbamos todas las semanas? Ni hablar .La peluquería formaba parte de los grandes acontecimientos. Te habías puesto el vestido nuevo. (Antes siempre había un vestido nuevo) y... a posar
.
Te sentaban en un taburete ligeramente de lado, nunca de frente. Después te ponían mirando al lado contrario porque buscaban tu lado bueno.
Mira que yo llevo años con la misma cara (mejor dicho, parecida) y aún no sé cual es mi lado bueno. Y empezaba el baile.

Sube la cabeza un poco... No tanto. Baja los hombros. Gira a la derecha...más, más. Así. Quieta. Mira arriba. No, al foco. Cierra un poco los ojos. Menos. Así Quieta. Sonríe. Humedécete los labios. No abras tanto la boca. Relájate. Adelanta un poco el brazo derecho. Menos, menos. Estira el cuello. Sonríe otra vez. Quieta, quieta.
,
No estoy exagerando. Quizás me quede corta.

Si la foto era vestida de manchega, que todas la tenemos, a todo esto había que añadirle que quede bien el traje, que se te vean un poco las enaguas que son preciosas y un trocito de pierna (no mucha pierna, claro) para lucir las medias

Las de la boda eran especiales. Los dos con cara de idiotas, de “atontolinaos”. Pero no es que salíamos con esa cara de lelos es que éramos bastante ignorantes en asuntos de matrimonio

La clásica foto con mantilla, (que todas tenemos) eran las más conflictivas porque a la cuarta postura ya notabas que la teja se iba para atrás y que las horquillas se te estaban clavando y tú tenías que estar relajada y sonriendo.

Al final todo salía bien. O por lo menos así lo creíamos. Pero no. Salía bien. Yo ahora miro las fotos de cuando yo era joven y veo que son fotos muy buenas. Ni una arruga. Ni una papada
.
A mi las de ahora no me gustan. Estas cámaras modernas no me sacan bien. ¡ Menuda diferencia con las de antes !Quizás el color es ahora más bonito, pero la imagen que es lo importante no se puede ni comparar.
..
No resisto la tentación de contaros un sucedido auténtico, real
.
Un electricista que viene a casa a no se qué arreglo. Una foto que tengo en el vestíbulo, donde más se ve, de cuando yo tenía veintitantos años y elegida entre las muchas que tengo .Álbumes y álbumes de fotos. He sido muy retratera
.
El electricista me pregunta: ¿Quien es esta de la foto? Soy yo, le contesto. Y él, sin pensárselo dos veces dice. ¡Hay qué lástima ! Sin comentarios.

He dejado de ser retratera. Radical. A mi las nuevas cámaras, los nuevos procedimientos de hacer fotos no me van a dar más berrinches. Si conocéis algún fotógrafo de los de antes no tengo inconveniente en volver a posar. Sin mantilla, claro.