miércoles, 8 de agosto de 2007

¡Y YO CON ESTOS PELOS...!


Cuando nos jubilamos nos quedamos un poco en el aire. Ya no eres lo que eras. Eras juez, vigilante nocturno, fontanero, director de un banco, profesor, funcionario...Eras algo que ya no eres. Pasas a ser Don Ramón, a secas, o Celestino Fernández (Es un ejemplo)Y ya está.

Es en este tiempo en el que, sin proponértelo, piensas: ¿Y ahora qué?

Es el tiempo del vaso medio lleno y medio vacío. Se presenta ante ti, de una manera machacona, esta alternativa: ¿Me queda un tiempo precioso para mis apetencias y mis " hacer lo que quiera"? O más bien: Esto se acaba y me siento, mano sobre mano, a verla venir. (He dicho ver-LA no verlas venir) Sin mentarla. Lagarto, lagarto.

Por estas formas de enfrentarse a este tiempo, es por lo que hay dos clases de jubilados, bien diferenciadas..Esencialmente estas dos clases.

Yo elegí el vaso medio lleno. A mí la jubilación me parece un tiempo precioso, un tiempo en el que muchas de las responsabilidades, los trabajos, las prisas y el stress han desaparecido. Tú y tu tiempo. ¿Qué más se puede pedir? "Ella" está ahí para todos. No tienes garantizada su visita a ninguna edad.

Elegí escribir, con un morro impresionante, para pasar mi tiempo libre. Mi mucho tiempo libre. El mano sobre mano, no me va nada. Necesito acción. Necesito vida. No me voy a parar hasta que no me paren.
Me dije: Veamos que sale de esta aventura. La ventaja que tenía y tengo es que no necesito cuidar el estilo. No se cuida lo que no se tiene.

Pero me equivoqué. (Propio de los aprendices). Desde el principio me comprometí a no escribir de política. ¡ Anda que...!

Política es el colegio de los niños, el ADN, las recogidas de basuras, el recibo de la luz, el A.V.E, la policía urbana, la globalización, la capa de ozono... O sea. Todo .Absolutamente todo es política.. Porque esto es la vida y el cómo movernos en ella
.
Y yo, tonta de mí, me dije: No voy a escribir de política, Y ahora me pregunto de nuevo: Entonces,¿ de qué he estado escribiendo este tiempo?

Ahora, experimentada ya, corrijo: No voy hablar de políticos. De hombres y mujeres con cargos de responsabilidad pública Y ahora que sé que me comprometí tontamente, ahora que aprendí a distinguir la política de los políticos, me equivoco de nuevo.

Porque yo quiero escribir de las meteduras de pata (me refiero a errores) de esos señores y damas con nombre y apellido. Esos de los que se dice primero el cargo y luego el nombre.

Quiero escribir de corrupción, de empecinamiento, de odio, de talante, de indiscreción de sumisión, de descaro, de falta de educación, de precipitación, de falta de juicio, de desconcierto, de cambio de opinión y un largo etcétera

Quiero tener el valor de decir, en cada momento, lo que me parece la actuación de un señor o señora con nombre propio
.
Quiero ejercer mi derecho a criticar todo lo que no me gusta, todo lo que me parece negativo o injusto.

Y yo misma me pregunto: ¿Por qué me han entrado, de repente, estas ganas de opinar de todo lo que en estos tiempos no hice? Y pensando, solamente veo una causa. Hay tajo. Hay mucho tajo
Se está poniendo el patio mundial de una forma que, quedarse sin opinión es como quedarse muerto.

Cada noticia mueve el ánimo. ¡Y cómo! Lo anecdótico no tiene ya cabida en este mundo lleno
de grandes acontecimientos. Lo trascendental es el pan nuestro de cada día
.
Y ya me decido a opinar. Y ahora que me levanto el tonto veto, me encuentro con que no sé cómo meterle mano a tanta gente corrupta, indigna, malos gobernantes, malvados o necios hombres públicos.
Ya puedes largar cuanto quieras. El campo es tuyo.. ¡Y yo con estos pelos...!

3 comentarios:

mia dijo...

Sabes que es lo que te pasa Ysabel????, bueno, "creo", que ando yo ya como toda esa gente que de una opinión personal pretende poco menos que hacer una ley...

Pero bueno, que me lío, que yo creo que es lo mismo que me pasa a mi con un plato demasiado lleno, que lo miro, y me dan naúseas, que lo vuelvo a mirar, y no se por donde empezar, y que aún cuando antes de que me lo sirvieran (si me lo sirvo yo, como ya me conozco, eso no pasa claro) pues eso, que aunque antes de que me lo sirvieran estuviera muertecita de hambre, al ver tal ¿abundancia", soy incapaz ni de empezar...

Y chica, has decidido enfrentarte a un plato demasiado lleno, y eso, no hay estómago medianamente normalito que lo pueda aguantar...

BETTINA dijo...

Dos puntos:
Primero me alegro que hayas elegido el vaso medio lleno. Me alegro que sientas que hay mucho por hacer, porque lo hay. Que tengas presente que "la fulana" no es cosa solo de jubilados, que nos puede hacer una visita a cualquiera de nosotrs (yo de momento le cierro la puerta por si acaso)
Segundo. Aprovecha tu que puedes!!! Cómete el plato entero! Despotrica contra esos señores de puesto antepuesto al nombre. Qué tienes que perder! Ya quisiera yo, ya quisiera yo...
Y por último, te leo, te releo y no veas las ganas que me entran de jubilarme Ysabel!!!!

benito_reyes_vega dijo...

Es posible que el vaso se empiece a ver medio -como cada cual quiera-... desde mucho antes de la jubilación laboral. Seguramente desde chiquitos... ya nos marcamos el ángulo de visión.

Me alegro por ti y por quienes te leemos Ysabel. A ver, si no, cómo te podríamos leer si "para otro lado" estuvieras mirando.

Me gusta como juegas con el lenguaje... tu ironía. Me gusta. Le das vida a "las cosas" con realista estilo -que aunque republicano te perdono-