jueves, 2 de septiembre de 2010

LA CODORNIZ

Porque justo es, que si te ensañas con lo que tú consideras nefasto, como es el exceso de truculencias en televisión, ensalces esa otra parte que te permite sonreír y pasar un buen rato.

De mis años pasados, en aquellos tiempos en los que yo podía decir que era una jovenzuela, disfrutamos de una revista, fundada por Mihura, llamada La codorniz.

Terminada la guerra y pasados unos pocos años de acomodación a los nuevos tiempos, era necesario un paliativo a tanto dolor sufrido por ambos bandos, y como agua de Mayo nació esta revista de humor.

Pudimos disfrutar con la ironía y la gracia de las viñetas de Tono, Herreros, Chumy Chumez, Mingote, Álvaro de la Iglesia, Summers y un largo etc.que lamento no recordar.

Artículos y viñetas, siempre rozando lo permitido por la censura, tan dura en los tiempos de la postguerra.

Eran un desfile de personajes, representativos de la nueva sociedad de aquellos tiempos. Y pegadita al personaje su crítica y parte ridícula correspondiente.

De vez en cuando, una portada, un artículo o una viñeta se salían de lo permitido y La codorniz, castigada por su osadía, dejaba de publicarse por un periodo de tiempo. Y esto, que parecía un castigo, revertía en los editores como una especie de publicidad que aumentaba sus ventas
.
El reclamo, astuto reclamo muy bien pensado era: "La revista más audaz para el lector más inteligente".

Los que ahora hacen publicidad deberían aprender. Ahora funcionan así: Parten siempre de una idea erótica, más o menos explícita y a continuación anuncian la papilla de un bebe.
Y esta otra. A partir de algo relacionado con el sexo... y a continuación, una faja ortopédica para los dolores lumbares. Porque oyeron que el " sexo vende" y de ahí no hay quien los baje.

Aún podemos disfrutar de algunos de aquellos humoristas. El incombustible Mingote. Inimitable. Genial. Único. Pero yo no lo catalogo como un humorista puro sino como un crítico de la actualidad. El vehículo que usa, son esos dibujos magistrales, pero su contenido nunca es una risa, sino una reflexión.

Aún tenemos a Forges que cultiva el absurdo en texto y forma. Peridis, El Roto y un largo etc.

Si hablando de humor no recordamos a Sánchez Polack, el inimitable Tip ,es delito grave.

La pareja Tip y Coll nos dieron en televisión y en radio muchos días de gloria. Desaparecido Tip, en solitario Coll se desvanece por su carácter agrio y desagradable.

Tip era un surrealista puro. Un genio del humor rodeado de hombre. Daba la impresión de no necesitar guión porque el torrente de felices ocurrencias era imparable
.
Alfonso Ussía le salió la cordura y es ahora un articulista moderado. Se especializó en ridiculizar a esa " Altísima casta social" y el Marqué de Sotoancho nos daba la impresión de haberlo conocido toda la vida.

Martes y Trece, que también llenó un tiempo, al disociarse perdieron toda su gracia. Por separado dejaron de ser geniales. En la memoria de todos queda esa "Empanadilla de Móstoles" con la que, especialmente Millán Salcedo, quedó felizmente marcado.

Gila, creador de un humor basado en el absurdo, fue uno de los grandes. El único problema que, a mi entender tuvo, fue que se recreó en sus grandes éxitos y fue incapaz de crear nuevos textos.

Hoy en nuestras pantallas Los Morancos que tienen su público, entre los que no me encuentro. Cruz y Raya que yo no los considero como representantes de genuino humor sino que, con su manera magistral de disfrazarse, consiguen la risa para sus textos

Faemino y Cansado tienen un humor genial, a mi gusto, pero sé que no llegan a un montón de gente.

Y muy a la moda, estos últimos tiempos, los monólogos empezados en Paramount Comedy Algunos muy buenos .Son guiones escritos de antemano y que dicen la mayoría de las veces, sus mismos autores.

Les Luthiers, ese grupo argentino, es uno de los que tienen más éxito a nivel mundial. Reconocidos en el mundo de habla hispana como los mejores humoristas en la actualidad.

De nuestra tierra manchega, incluso de Albacete capital, son los que se están abriendo camino en televisión con "La hora chanante" Es la vulgaridad presentada de una manera divertida. Es la escenificación de personajes célebres, pasados por el rodillo de lo vulgar y chabacano. Es la antítesis del “ glamour”. Rozando lo escatológico y a veces sobrepasándolo, no cabe duda que están creando un nuevo tipo de humor. Que ya es difícil.
Caiga quien caiga. Hora Hache y Buenfuente, programas en pantalla, en la actualidad, están tan politizados que solamente harán sonreír a los del partido político que los patrocina. Yo me estoy refiriendo al Humor. Con mayúscula.
Tenemos que convencernos que el humor suaviza tensiones y nos hace contemplar todas las cosas con otro semblante. Y que hay gente a la que debería recetársela el médico. Como terapia contra dolores hepáticos.

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