HOSPITAL UNIVERSITARO DE ALBACETE , CHAPEAU!


Chapeau es francés. Significa sombrero, pero si digo sombrero no pega,¡. En cambio, si digo "chapeau" si que pega mucho con lo que quiero decir.
Yo leo correctamente francés, los entiendo bastante bien y lo chapurreo.
Chapurreo quiere decir que tengo que decir la misma cosa tres o cuatro veces ayudada de mucha mímica y grandes gestos expresivos para, al final dejar la sonrisa puesta por ambas partes y que viene a ser un " Vamos a dejarlo estar"
Pero mi intención no era hablar de mis conocimientos lingüísticos sino de lo bien que funciona el Hospital Universitario de Albacete.
Nada que ver con ir a visitar a tu cuñada que la han operado de la vesícula, con el hecho de estar ingresada con un asunto grave e importante.
No me voy a referir con pelos y señales a toda la sintomatología de mi enfermedad,( tentación que tenemos todos los enfermos de contar detalladamente todo el proceso. Hasta el alta.)Porque el tema no hace al caso y que, resumiendo y que diré con palabras técnicas:"Las he pasado canutas"
Pero ya está- Finito.
Aquí el protagonista es el Hospital Universitario de Albacete. Desde el Director o directores hasta la última limpiadora. Desde el médico especialista hasta el que lleva esas grandes carretillas de sábanas a lavar. Y enfermeras y celadores y los que no se ven, cocineros, compradores. Un auténtico enjambre de personal a nuestro servicio.
Me recordaba una rueda inmensa, como una noria en la que todo funciona al compás, sin estridencias, sin pausas.
He tenido la sensación, desde el primer momento, que no me iban a dejar caer. Que pasaba de unas manos a otras, de un pinchazo a un eco, de un electro a una radiografía, un PAC...La comida con sus exactas calorías. El aseo personal. La pastilla..Y yo malica pero enterándome de todo lo que estaba pasando
Y muy tranquila. Con el pensamiento único de "Estoy en buenas manos" "De esta salgo" Y sobre todas las cosas rechazando con fuerza ese pensamiento idiota de "Salir con los pies p*alante" Porque , a poco que lo pienses ese no es precisamente un pensamiento positivo.
Que nadie, delante de mí, hable mal del Hospital de Albacete.
Porque acepto que haya dos maneras de opinar. Dos puntos de vista-
Una. La de que va a visitar a la tía Engracia, que se ha roto la cadera y que visita por puro compromiso y que aunque no tiene hijos no piensa heredar porque solamente tiene la pensión mínima y creo que se la quitan cuando se muera.. Y la otra es, cuando llamas al 112 porque ves que estás pelechando, (también puede decirse que te estás muriendo a rajas) y llegan a tu puerta con el oxígeno y la silla de ruedas y sobre todas las cosas el ánimo de protegerte, porque se ve ya en ese primer momento que van a tener cuidado de ti.
Es el momento en el que dejas de ser persona para convertirte en una criatura indefensa y dependiente. Que nadie hable mal del Hospital Y si eres de naturaleza criticona, si tienes tendencia a ver solamente lo malo de la vida, coge una de las gripes de las malas, o atrévete con una neumonía y que te ingresen y...¡Ya me contarás!
A los que protestan habrá que dejarles su espacio. He visto un cartel en uno de los pisos que dice:"Área de críticos".Será para reunirse allí los descontentos.
Comentarios tales como un celador de mal genio... ¿Pretenden que solo les den permiso para reñir con la novia los días que libran?
Que hay papeles en el suelo del baño. Pero eso no los pone el hospital es ese señor que no cuida lo que es de todos.
El tiempo que se tarda en urgencias. ¿Habéis oído hablar de prioridades? ¿ Has pensado en un bebé que se ahoga y lo que le duele a la tía Engracia la rodilla'’
Yo se que cada uno habla de la feria según le va en ella. Pero si no te gusta el baile, la música, los cachivaches de montar ni los churros con chocolate a las tres de la mañana… no vayas a la feria.
Si vas predispuesta a ver todos los defectos del hospital...No vayas Quédate en casa con tu prima Amparo, que es muy cariñosa y te va a hacer un caldo bien sabroso con su hueso y su loncha de tocino que igual te lleva a eso tan feo de los pies.... Evita el hospital
A mí que me lleven cuando lo necesite. y volveré a confiar plenamente en su eficiencia, en su buen funcionamiento. en su trato amable y en todo lo bueno que yo he encontrado.
Mi buen recuerdo para todos los profesionales que desfilaron por la habitación 436.
Gracias amigos.